¡Aquí tienes una receta de cheesecake paso a paso para que puedas disfrutar de un postre cremoso y delicioso!
Ingredientes:
Para la base:
- 200 g de galletas tipo María o Digestive
- 100 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
- 500 g de queso crema (tipo Philadelphia)
- 200 g de azúcar
- 200 ml de crema de leche (nata)
- 3 huevos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 cucharada de harina de trigo (opcional, para mayor consistencia)
Para la cobertura (opcional):
- Mermelada de frutos rojos o caramelo
Instrucciones:
1. Preparar la base:
- Tritura las galletas hasta que queden finas (puedes usar una procesadora o colocarlas en una bolsa y aplastarlas con un rodillo).
- Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta formar una masa homogénea.
- Coloca esta mezcla en el fondo de un molde desmontable (aproximadamente 20-22 cm de diámetro) y presiona con una cuchara para formar una base firme. Lleva el molde al refrigerador mientras preparas el relleno.
2. Preparar el relleno:
- Precalienta el horno a 160 °C (320 °F).
- En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que esté suave y cremoso.
- Agrega la crema de leche (nata) y el extracto de vainilla, y mezcla bien.
- Incorpora los huevos uno a uno, batiendo después de cada adición. Si deseas que el cheesecake tenga una textura más firme, puedes agregar una cucharada de harina de trigo y mezclar bien.
3. Hornear:
- Vierte el relleno sobre la base de galletas que preparaste.
- Coloca el molde en el horno y hornea durante aproximadamente 50-60 minutos. Sabrás que el cheesecake está listo cuando los bordes estén firmes pero el centro aún tenga un leve movimiento (se asentará al enfriarse).
- Apaga el horno y deja que el cheesecake se enfríe dentro del horno con la puerta entreabierta para evitar que se agriete.
4. Enfriar:
- Una vez que el cheesecake esté completamente frío, llévalo al refrigerador por al menos 4 horas o toda la noche para que tome consistencia.
5. Añadir la cobertura:
- Si lo deseas, puedes añadir mermelada de frutos rojos, caramelo, o cualquier otra cobertura antes de servir.
¡Y eso es todo! Este cheesecake tiene una textura suave y cremosa, ideal para cualquier ocasión. ¿Te gustaría agregar alguna variación o tienes algún detalle en mente que te gustaría cambiar en la receta?